Cupido ya no te pone
- WORKOUT NEWS
Por Eva Valldeperas
San Valentín está demodé. Es ñoño, irreal, inmaduro... Ha sido tan explotado, manoseado, comercializado, que ya no cuela.
A partir de ya celebremos Eros, celebremos de lo que el amor se alimenta, al menos en su fase inicial, de seducción, sensualidad, sexualidad.
Eros nace del caos, es pasión, lujuria, desenfreno.. y si, también hay amor en ello, tal vez del mejor, del que quieres para ti pero también del que disfruta el otro, amor compartido.
Todo florece con una mirada seductora, con el roce de unas manos que se gustan, con un olor cargado de erotismo, con un orgasmo…
“A flor de piel” describe lo anterior, una piel que despierta antes, durante y después palpitando sangre, ruborizada, nutrida, oxigenada. Y es que la piel es el órgano sexual más extenso y tal vez más importante que tenemos mujeres y hombres. Nuestro cuerpo habita en dos metros cuadrados de piel, la que nos conecta con el exterior, la que nos une al otro, la que nos hace comunicarnos sin necesidad de hablar.
Piel besada, acariciada, tomada...
enviando señales nerviosas hacia el interior y activando las hormonas que la van a hacer brillar.
El cortisol baja y sube la producción de colágeno.
Los estrógenos se disparan durante el orgasmo y aumentan la regeneración celular.
¡La oxitocina estimula la prolactina conduciéndonos a un estado de relajación muscular que alisa arrugas!
La dehidroepiandrosterona (DHEA) Retrasa el envejecimiento cutáneo (en menopausia cae en picado).
Las endorfinas que favorecen la producción de fibroblastos y tienen una acción anti-inflamatoria.
Piel sudada, sonrojada, viva. Objeto de deseo. Eros.
Y supongo que coincidirás conmigo en que, sin seducción, sensualidad y sexualidad, la vida es menos vida. Si no damos placer a nuestros sentidos, ¿En qué nos convertimos? La sola idea me es totalmente extraña.
Desterrado Valentín, celebra a Eros con tres ejercicios
Uno de seducción, otro de sensualidad y un último sexual. Los puedes hacer por separado o enlazarlos como una cadena de acontecimientos, sola o en compañía, tu decides.
El primero, el de seducción, ves desnudándote despacio, dejando la ropa resbalar, y con cada pieza que dejas caer envuelve tu piel con la bruma Ethereal Elixir de Sublime Oils, inhala su aroma y siente como cae sobre tu piel, como te viste.
El segundo, el de sensualidad, limpia tu piel esta noche, cierra los ojos, Ylumyna Crema de Sublime Oils en la yema de los dedos y muy despacio y suavemente ves deslizándola por la cara, sin prisa, siente la textura, su fragancia, nota como tu piel la recibe.
El tercero, el sexual, desnuda completamente y estirada en la cama, deja dos gotas de aceite Firming de Sublime Oils resbalar sobre los pezones, dibujando pequeños círculos alrededor de ellos y ampliándolos cubre todo el pecho.
Con aceite íntimo Intyma Oil de Sublime Oils haz lo mismo en el pubis, de fuera hacia adentro esta vez, desde las ingles hacia el monte de Venus y de ahí, sin prisas, hacia su interior.
¡A disfrutar!